En noviembre la actividad económica mostró por tercer mes consecutivo un retroceso mensual, del 0,7%. Así, la actividad económica acumuló un incremento del 5,9% en los primeros once meses de 2022 y un 2,6% a nivel interanual. De los 16 rubros relevados, 3 se mostraron a la baja en términos interanuales en noviembre: pesca, con el 16,8%; agricultura y ganadería, que cayó 6,3% fuertemente influenciada por la sequía; e intermediación financiera, con el 3,3%. El rubro de Hoteles y Restaurantes fue el de mayor incremento año contra año, con un alza del 22%, cifra que aún se encuentra influenciada por la baja base de comparación del 2021. Versus 2019 el sector se ubicó 7,7% por debajo, por lo que se espera que pueda finalizar su recuperación pos-pandemia en los próximos meses.
Respecto a los datos del sector de alojamientos turísticos, según los registros del INDEC en noviembre las pernoctaciones en alojamientos rondaron las 3,96 M, lo cual implica un incremento de 26% respecto al mismo mes de 2021. En noviembre, las pernoctaciones totales se encontraron 2,4% por debajo del nivel del mismo mes de 2019, dado que las pernoctaciones de residentes se encontraron 7,5% por encima, mientras que las pernoctaciones de no residentes continuaron un 30% por debajo. A su vez, la estadía promedio de los viajeros fue de 2,3 noches, lo que representa un 5,4% menos que el mismo mes del año anterior.
En el plano comercial, el INDEC informó que en noviembre las ventas reales de supermercados registraron un aumento del 2,5% interanual. Las ventas del canal mayorista también crecieron durante noviembre, ya que la comparación mensual desestacionalizada mostró una mejora del 5,8% contra octubre. En cambio, en la comparación interanual las ventas de mayoristas se ubicaron un 2,1% por debajo de noviembre de 2021. Por su lado, las operaciones en los centros comerciales o shoppings crecieron 7,2% respecto al mismo mes del año anterior, en términos reales.
Respecto a los precios, luego de un 2022 en el que el precio de la carne quedó muy por debajo de la inflación, en enero los valores de la hacienda parecen haber despertado. Según datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina, durante 2022 el precio de las carnes aumentó un 42,4%, ubicándose muy por debajo del nivel general de inflación anual (94,8%), debido al escenario de altos niveles de faena producto de la sequía y debilidad en la demanda. Sin embargo, en enero de 2023 los precios de las diferentes categorías de hacienda de consumo se mostraron notablemente al alza: el novillito aumentó su precio en 29,2% durante lo que va de enero, mientras que el novillito lo hizo en un 35,2%. Según especialistas y referentes de la industria ganadera las subas responden a un reacomodamiento de los precios y a una menor oferta de animales pesados por parte de los feedlots. Se espera que durante las próximas semanas estas subas se reflejen en los mostradores de los comercios. Por supuesto que el aumento notable en el precio de las carnes amenaza al proceso de desaceleración de la inflación observado durante noviembre y diciembre, ya que el peso de la carne en el IPC es casi del 5% y representa aproximadamente el 15% del rubro de alimentos y bebidas.
Por último, un relevamiento del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz reveló que seis gremios lograron un crecimiento real en los salarios de sus trabajadores durante 2022, algunos de ellos fueron: trabajadores de transporte de corta y media distancia (+10,9%), empleados de comercio (+6,1%), trabajadores de la construcción (+2,6%) y los de sanidad (1,6%). A su vez, el Salario Mínimo Nacional Docente Garantizado también registró un aumento del 1,2% real interanual. El gremio que se vio más perjudicado frente a la inflación fue el de Camioneros, ya que los salarios básicos de ese rubro presentaron una caída interanual real del 6,5%.